Llegan las noticias:
han entrado a tu casa,
vestian como siempre,
olían como siempre,
los niños como escudo...
Sin embargo no se me ocurre nada,
nada,
aprieto los puños y siento las uñas
clavadas en mi carne.
Se me ocurre pensar en sauces ,
en carretas ,en hombres ,en gritos,
los árboles que gritan y que lloran,
por que los hombres han perdido
el habla.
Hasta los pájaros duermen escondidos,
en pleno día, sienten que algo muy grave
pasa.
Y a mi no se me ocurre nada,
entonces vengo y escribo, escribo,
por si a alguien le sirviera de algo.
Mi sangre es verde azul no sé ,
si la vertiera, no se notaria en el río
amamantaría árboles.
Para transformar en águilas mis fluidos,
que por la maldita costumbre de morir,
dejará de navegar en mi cuerpo y
en el tuyo, casi ahora mismo.
Como dijo el ruso cerebral un día:
"Habrán mares de sangre antes que la humanidad
alcance la victoria"
La victoria de todos los árboles de sangre verde azul,
la roja de las manzanas,
Mientras a mi sólo se me ocurre escribir sin tener
la certeza si servirá para algo.
Nina salinas madrid 05/11/2009
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